Emplazado en el espacio verde frente al barrio juan garay, el monumento a los reconocidos músicos de nuestra ciudad inaugurado en diciembre pasado, sufrió primero la rotura de los instrumentos, luego la figura del diablero y también sobre los personajes siendo una pena el estado actual. Chicos y padres no cuidan.
Se conoce que hay varios chicos que ocasionan daños como si nada en los espacios públicos, pero también se observó a los padres montando a los hijos sobre las figuras para sacarse fotos, deteriorando las obras.