La mamá de un alumno en la escuela Aristides Nibi (al lado del Juzgado Federal), contó la situación que le toca pasar junto a otras madres, en conflicto con los directivos que tuvo un fuerte altercado días atrás llegado ambas partes a denuncias, aun cuando ya había antes consigna policial en el interior del establecimiento, con efectivos armados frente a los chicos. Todo derivado del planteo por las rendiciones, principalmente ingresos y egreso del quisco.
La situación se tornó conflictiva desde las reuniones, puntualizó Beatriz, la mamá, a la hora de pedir las rendiciones del dinero, principalmente del quisco que figura el alquiler mensual por $1.100.000 a una de las “Ordenanzas”, pero sería $1.500.000.
¿Cooperadora? Según la mamá, es fantasma porque nunca aparece, pero la directora maneja una lista de padres y cuenta con las firmas avalando todos los movimientos, por ejemplo por la copa de leche.
Desde los cuestionamientos por falta de rendiciones, dijo la mamá que hay una consigna policial en el interior del establecimiento, algo que considera fuera de lugar porque están armados frente a los chicos, y en la misma comisaría le dijeron que los efectivos deben estar afuera.
La madre en cuestión, y otras mamás no pueden acceder a la escuela, y no la dejaron participar de un evento de los chicos en la semana, siendo atendida en la vereda cuando va a realizar consultas por su hijo.
El punto más alto del conflicto, relató fue cuando luego de una reunión se quedó con otras mamás sentada afuera, y cuando vio a la vicedirectora en la puerta del establecimiento se le acercó para hablar. La reacción de la directiva (según la mamá), fue una suerte de crisis de histeria gritando “No me toqués”, “No me pegués” ya los manotazos, motivando la salida de consigna policial y la ingresó al interior del establecimiento.
Una situación poco feliz, que llevó a la madre a radicar una denuncia policial por todo lo que esta ocurriendo, y fue en la comisaría donde también llegaron la vicedirectora y directora para hacer denuncia.
Todo por el pedido de las rendiciones, aclaró la mamá, observando que no ven nada de mejoras en la institución.





